Ahorros mal entendidos

Recientemente, la Secretaría de Hacienda y Crédito Público (SHCP) presentó a la Cámara de Diputados la propuesta del Presupuesto de Egresos de la Federación 2017.

En este sentido, la educación es uno de los rubros con mayor recorte presupuestal.

Por ejemplo:

  1. Formación docente y continua, tutoría y cursos (sufre recorte del 34% al pasar de $1,409 millones a $929 millones.)
  2. Infraestructura en las escuelas (recorte del 71.9% al pasar de $7,607 millones a $2,141 millones). B.C. requiere de una inversión de $4,244 MDP.
  3. Programas de inclusión y equidad educativa (recorte 34.6% al pasar de $443 millones a $289 millones)
  4. Programas para educación inicial dirigidos a niños de 0 a 6 años (recorte del 100%, desaparición del programa de Fortalecimiento de Educación Temprana y el Desarrollo Infantil.
  5. Evaluación de aprendizaje a alumnos (recorte del 29.8% al pasar de $282 millones a $198 millones).
  6. Becas educativas para niñas y niños indígenas de educación básica (recorte de 29% al pasar de $295 millones a $209 millones).
  7. Escuelas de Tiempo Completo, reducción de mi millones de pesos a 10 mil 61 millones de pesos para el 2017 equivalente al 9%.

Este recorte presupuestal –sumado a los malos manejos que hay del dinero destinado para la educación– produce más desigualdades y resta oportunidades para el aprendizaje incluyente.

En lugar de ser un mecanismo de inclusión y justicia para los niños y maestros en México, se gasta muchos recursos públicos cada año pero no se invierte mejor en la educación.

COPASE se une con otras organizaciones de la sociedad civil en el país para reclamar a la autoridades federales y estatales, al Instituto Nacional para la Evaluación de la Educación (INEE) y a los legisladores federales a asumir su responsabilidad, ser congruentes y reorientar el presupuesto educativo 2017 hacia los alumnos, maestros y escuelas que más lo necesitan en el país.

No recortar en la educación, si gastar mejor.

COPASE reafirma su firme compromiso de seguir colaborando por el mejoramiento real, estructural y permanente de la educación y de dar seguimiento a las acciones planteadas y exigir resultados.